Détox reflexivo y creativo

Recibí un mensaje, consultándome si estaba bien porque hacía varios meses que no posteamos nada en nuestras redes. Claro, en un contexto tan complejo, de tanta incertidumbre, es lógico suponer que si no posteas algo, es porque algo pasa… algo no tan bueno.

Y si.. nos pasó algo, pero para nosotros estuvo muy bueno! Porque todos estos meses, estuvimos haciendo lo que muchísimas organizaciones hicieron: un Détox Reflexivo. Paramos la pelota para repensarnos. Volvimos a conectarnos profundamente con nuestro propósito. Buscamos inspiración y encontramos a Tim Leberecht que fue una fuente inagotable de ideas, gracias Tim!

Depurar nuestro mindset nos permitió conocer gente y por lo tanto acercarnos a ideas nuevas, deconstruir conceptos y acercarnos a un espacio de experimentación, que por la vorágine del día a día, habíamos abandonado. Esto, nos generó lugar en nuestro disco rígido para encarar nuevas aventuras. …

Algunas cosas no cambiaron. Reafirmamos que las empresas, enormes, grandes, medianas, chicas, las que no tienen fin de lucro, las que buscan ganar dividendos, son encuentros entre personas. Espacios subjetivos e intersubjetivos, creados por seres humanos que aportan su mirada, su creatividad y su reflexión. Y en plena expansión de la IA y el machine learning, las organizaciones tienen que tender a ser cada día más humanas.

Pero, ¿cómo logramos organizaciones más humanas? Focalizando la contribución de los equipos de personas en las cosas que pueden hacer y delegando en los sofisticados sistemas, las áreas que les corresponde, las áreas no — humanas.

Partimos de la base, que el mundo del trabajo es un espacio de personas adultas y responsables, (gracias Patty McCord!!!) que pueden tomar sus propias decisiones en espacios donde las reglas de juego sean claras y explícitas. Donde los seres humanos puedan expresar su ser, y no solo llevar al trabajo un mínimo porcentaje de él.

Para colaborar en el proceso de hacer cada día un poquito más humano el mundo del trabajo, nos focalizamos en cuatro pilares básicos:

El arte: esa “manifestación de la actividad humana mediante la cual se interpreta lo real o se plasma lo imaginado…”[1] esa capacidad de sublimar, de trascender, de dejar una huella. Esa capacidad creativa y de innovación de tomar lo que encontramos y darle una nueva vida, una nueva visión. Una visión estética, que nos aporte belleza, que nos sorprenda y nos acerque lo inesperado. Gracias Marcel Dechamps! Los seres humanos necesitamos del arte.

La posibilidad de vincularnos, en lugar de conectarnos. ¿Cómo entendemos los vínculos? “Un vínculo es el movimiento más o menos estable de investiduras, representaciones y de acciones que asocian a dos o más sujetos para ciertas realizaciones psíquicas: cumplimiento de deseos, protección y defensa, levantamiento de prohibiciones, acciones comunes (hacer, jugar, disfrutar, amar juntos, etc.)”.[2] El vínculo, nos genera las condiciones para la empatía, para ejercer nuestra libertad, actuando con responsabilidad. En la capacidad de vincularnos, nos desintoxicamos de la culpa y generamos la seguridad psicológica para crear, aprende, innovar, equivocarnos, caernos, volver a empezar.

La autenticidad, la propia identidad, en la cuál somos nosotros, con nuestras luces y con nuestras sombras, imperfectos. La aceptación de nosotros mismos es lo que nos permite aceptar a los demás. Enriquecernos con la diversidad. Esto nos permitirá generar estructuras distribuidas con la aceptación consciente de lo que podemos y no podemos hacer.

Work in progress. Estamos en un proceso de construcción y deconstrucción permanente. No estamos incompletos, sino en curso. Siempre necesitamos a los demás para avanzar en nuestra vida. Como la música de la partitura, comienza con la escritura, es música cuando los diferentes artistas la ejecutan, se enriquece cuando alguien la escucha, trasciende cuando te hace vivir una experiencia extraordinaria.

Estas son los pilares en los que estuvimos trabajando internamente, focalizadas en contribuir con organizaciones sustentables, humanas y horizontales, tanto desde la gestión como desde el governance. Colaborando en la integración de miradas diversas, enriquecidas con el disenso, respetuosas y donde la experiencia humana, siempre esté en el centro.

[1] Definición de Arte RAE

[2] René Kaës, La realidad Psíquica del Vínculo, Revista internacional de Psicoanálisis de Pareja y Familia, N 6 -2009/2 Vínculo